A nivel mundial, el personal médico ha estado al frente de la batalla contra la pandemia del COVID-19 que hasta el momento lleva más de 2,473,200 casos positivos y más de 170,000 muertes. Pero ante la crisis, la solidaridad también se ha hecho notar alrededor del mundo.
En países como España, Italia o Estados Unidos, los sistemas de salud han colapsado y, el freno a la economía a causa del confinamiento -en algunos casos obligatorio-, ha tenido efectos sin precedentes a nivel global.
Pero mientras doctores y enfermeras trabajan sin descanso para atender a los enfermos de COVID-19, muchos otros trabajan para procurar servicios básicos como luz, agua, teléfono, internet, supermercados o farmacias. Y otros más -desde voluntarios hasta grandes empresas- han donado tiempo, dinero y otros recursos, en apoyo a grupos vulnerables y al personal médico. Por ejemplo, el diseñador industrial Marco Barba convocó a un equipo multidisciplinario para realizar prototipos de respiradores mecánicos que ayuden a pacientes con COVID-19.
Con el inicio de la fase 3 en México, se suman al menos 8,772 casos positivos y más de 700 personas fallecidas. La crisis sanitaria -y económica, que se vislumbra para el país-, requiere de la alianza entre gobierno, empresa y sociedad civil para enfrentar la pandemia.
En ese marco, 116 Médicos Pasantes en Servicio Social de la Universidad Anáhuac Mayab brindan servicios de salud en 49 comunidades y en otras instituciones como el Hospital Regional de Alta Especialidad, UMAE IMSS Programa de Trasplantes, Hospitales de Alta Especialidad en la Ciudad de México, Hospitales en Chiapas, entre otros.
Para contribuir al cumplimiento de su misión, en días pasados arrancó la entrega de kits, gracias al esfuerzo y trabajo colaborativo entre la Universidad, el Gobierno Estatal y Federal. Los kits, que se distribuyeron uno a uno con apoyo de los profesores de la Escuela de Medicina de la Anáhuac Mayab, incluyeron algunos insumos básicos como: careta de acrílico, cubre bocas (quirúrgicos o KN95), guantes de látex, alcohol gel y bata quirúrgica.
Parte de estas caretas, fueron diseñadas y producidas por la División de Ingeniería de la Anáhuac Mayab, en alianza con el IYEM, cuya iniciativa integra a otras universidades y empresas.
Lo anterior, es muestra de que la voluntad y el trabajo en equipo al servicio de los demás, permite enfrentar la crisis de la mejor forma posible y buscar soluciones conjuntas que beneficien a todos.