Salud en todas las tallas

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Por: Redacción

30 de enero del 2023

¿Alguna vez en tu vida has hecho dieta para perder peso? Fue la pregunta con la que Raquel Lobatón, de las Nutriológicas, abrió la conferencia “Nutrición Integral e Incluyente” en la cual también participaron Gina Salame e Ilana Borovoy, de la misma agrupación como parte del ciclo de Cátedras Primas de la Universidad Anáhuac Mayab

 

Este encuentro, que se realizó en el marco del Día del Nutriólogo en México (27 de enero) y reunió a estudiantes de diversas carreras y universidades para hablar acerca de la alimentación respetuosa y liberación corporal, así como la importancia de promover la salud en todas las tallas y el problema social que provoca la gordofobia. 

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*Foto: Asistentes a la conferencia “Nutrición Integral e Incluyente”.

 

Raquel Lobatón, creadora del concepto Nutrición Incluyente® mencionó que la palabra “gordo” es un adjetivo como cualquier otro, pero nos hemos encargado de darle una connotación negativa y por ende, ha generado prejuicios y posturas negativas ante los cuerpos “no normativos”.

 

“Vivimos en una sociedad donde ha habido una sola narrativa dominante con respecto a los cuerpos, la salud y nutrición. Todos crecimos bajo cierta asunciones que jamás cuestionamos porque están en todas partes”, indicó Raquel Lobatón, refiriéndose a la narrativas que provienen de la cultura de dietas, que refuerzan la idea que hay cuerpos que son mejores que otros, que son más valiosos que otros, que son más saludables y bajo esta creencia se ha perpetuado un sistema que ha hecho mucho daño.

 

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*Foto: Las Nutriológicas durante su conferencia en la Universidad Anáhuac Mayab.

 

En este sentido, presentó 8 mitos acerca de la salud corporal/nutricional:

  1. Existen jerarquías corporales, que hay cuerpos que son mejores que otros pues se tiene la idea que el cuerpo perfecto es blanco, alto y delgado. Esto termina siendo opresivo.

  2. Se asume que todas las personas pueden ser delgadas y que sólo es cuestión de voluntad. Ésta es de las mayores creencias, pues se piensa que quien no es delgado es porque “no le echa ganas”; cuando realmente el peso corporal está regulado por factores biológicos que están fuera de nuestro control y también existe la diversidad corporal.

  3. Todas las personas deben ser delgadas. Es un mandato de delgadez que nos exige la sociedad. 

  4. La delgadez es sinónimo de salud y gordura de enfermedad, este es el mito más difícil y la gordofobia está validada por esta premisa. Por si fuera poco, está avalada por la sociedad médica, cuando realmente hay personas delgadas con problemas de salud, cabe destacar que la salud no es algo estático, sino algo dinámico que cambia a lo largo de nuestra vida. 

  5. Las personas gordas tienen malos hábitos de alimentación y actividad física. La activista Marilyn Wann señala que “Lo único que puedes predecir al ver a una persona gorda es tu nivel de prejuicios”, pues hay muchas personas gordas que hacen ejercicio. 

  6. Las personas gordas tienen un mayor riesgo de mortalidad. Diversos estudios muestran que las personas que caen en sobrepeso viven más, y las personas que caen en la categoría peso normal y obesidad están en el mismo rango de mortalidad.

  7. El IMC es un indicador confiable de salud. Esto no me dice nada de la salud de una persona, ésta métrica se basó en hombres blancos europeos perfectos y ahora con eso nos evalúan a todos, por lo que señalan que no debería ser confiable. 

  8. Las personas pueden bajar de peso y mantenerlo si tienen disciplina. La realidad es que las dietas no funcionan, el 95% de las personas que pierden peso con alguna intervención en un periodo de 2-5 años lo recupera.

En este sentido, compartió el ciclo de las dietas:

  1. Empiezo una dieta porque odio mi cuerpo, me enseñaron a odiarlo porque mi cuerpo debe verse de cierta manera, “si lo odias cámbialo por otro”. 

  2. Me desconecto de mi cuerpo con la dieta, y me enseñan a desconfiar de mi cuerpo y a buscar estrategias para no sentir hambre.

  3. Pensamos obsesivamente en comida, saciamos el hambre física pero no la mental. Pienso en aquello que me prohibieron ingerir.

  4. Tengo más rechazo por mi cuerpo, me vuelvo más hipervigilante en cuanto al peso y medidas. Con los halagos termino odiando más mi cuerpo del pasado. 

  5. Mi cuerpo entra en un estado de defensa porque no entiende que dejé de comer por los estándares de belleza que me presionan por redes sociales. El cuerpo empieza a resistirse y baja el gasto de calorías.

  6. Dejo la dieta porque es un acto de autocuidado, el cuerpo al ver que hay comida aprovecha a recuperar el peso perdido y un poco más por si se vuelve a acabar la comida. Entonces odio más a mi cuerpo y compro otro programa de dieta.

Es por esta situación social y de salud que se formó HAES® (salud en todas las tallas por sus siglas en inglés) que es un marco de referencia comprometido con el respeto, la integridad, la justicia y la inclusión abanderado por algunos especialistas, luchando en contra de la gordofobia y en contra de las dietas. 

 

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*Foto: (izq. a der.) Lic. Aurora Porrúa Ardura, Directora de la Escuela de Nutrición de la universidad en compañía de Raquel Lobatón, Gina Salame e Ilana Borovoy de las Nutriológicas. 

 

¿Cómo visibilizar la diversidad de cuerpos?

 

En lo individual, con familia, médicos y amigos: visibilizar la situación, alzar la voz, poner límites en conversaciones de dietas y de cuerpos y te invita a observar cómo te hablas y cómo te diriges hacia los demás.

 

Mientras que en lo colectivo: pretende impulsar espacios seguros, libres de prejuicios, equipos que acomoden a todas las personas, políticas públicas que atiendan los determinantes sociales de salud y que dejen de responsabilizar al individuo y la actualización académica en paradigmas alternos en salud. 

 

La salud nutricional en cifras:

  • 95% de las personas que hacen dieta recuperan el peso perdido en un periodo máximo de 5 años, y dos terceras partes recuperan más peso de aquel con el que iniciaron la dieta.

  • 1 de cada 4 adolescentes que hacen dieta con el fin de modificar el tamaño de su cuerpo desarrollan un trastorno de la conducta alimentaria. 

  • 70% de las personas que viven en cuerpo grande han sido víctimas de acoso, violencia y discriminación por el tamaño de su cuerpo por algún profesional de la salud y, por ende, no hacen medicina preventiva y llegan tarde a un diagnóstico.

    Ve la conferencia completa aquí  

 

Para saber más:

 

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