Hoy en día la pérdida de funcionalidad de órganos o tejidos es uno de los mayores problemas de salud. Los biomateriales y la ingeniería de tejidos permiten tratar el mal funcionamiento de órganos y/o tejidos generando estructuras donde pueden crecer nuevas células completamente funcionales. Pero, ¿qué son exactamente los biomateriales y cómo pueden mejorar la calidad de vida?
Un biomaterial es cualquier material, natural o artificial, que abarca total o parcialmente una estructura viva o un dispositivo biomédico que se realice o substituye una función natural. Es importante mencionar que la definición de “biomateriales” excluye a los materiales artificiales que se construyen de metales o de cerámica, explicó la Dra. María José Rivas Arreola, coordinadora de la licenciatura de Biotecnología, durante el marco del Día Internacional de la mujer y la niña en la ciencia.
Los biomateriales deben cumplir con ciertos criterios para ser funcionales y seguros. Entre las principales características que deben tener son:
Para saber si un compuesto o estructura es funcional, los requisitos mínimos que se deben evaluar son los siguientes: ser biocompatible, no tóxico ni carcinógeno, ser químicamente estable (considerando temperatura, presión, etc), tener una resistencia mecánica, densidad y peso adecuados, así como un diseño de ingeniería perfecto. También debe ser relativamente barato, reproducible y fácil de fabricar y procesar para su producción en gran escala.
La finalidad de los biopolímeros es tener materiales que no dependan de los compuestos de origen fósil para que nos ayuden a reducir la producción de gases de efecto invernadero debido a su estabilidad.
La Dra. Rivas mencionó que por medio de la síntesis química o de algunos organismos se pueden crear bioplásticos o también conocidos como biopolímeros plásticos los cuales cuentan con una estructura y propiedades similares a los plásticos de origen fósil, pero sin generar un impacto negativo en el medio ambiente.
Debido a las propiedades y características de biodegradabilidad, hace que sean muy versátiles para ser utilizados en muchas funciones de nuestra vida cotidiana (desde la conservación de alimentos, fabricación de envases, cirugías, entre muchos otros ejemplos).
La biotecnología brinda la posibilidad de mejorar la calidad de vida mediante la biomimética, la cual permite inspirarnos en la naturaleza para ver cómo se reparan tejidos y poder desarrollar estructuras, mecanismos y biomateriales para solucionar problemas en nuestro día a día. Al poder manipular el ADN de algunos organismos, es posible obtener un beneficio en particular como es el caso de la producción de una proteína recombinante (insulina humana).
Los biomateriales son de gran utilidad ya que pueden ser utilizados en diferentes ámbitos. Por lo tanto, deben ser evaluados con algunos parámetros específicos para que verdaderamente cumplan la función para la cual fueron diseñados y generen un beneficio. Es fundamental contar con una mezcla de química, nanotecnología, ingeniería y diseño para poder crear un material (biomaterial) que pueda sustituir una función del organismo sin afectar al medio ambiente, concluyó la especialista.