La fitoterapia consiste en una práctica médica basada en la ciencia y, por lo tanto, se distingue de otros enfoques más tradicionales, como la herbolaria. Las matrices vegetales complejas que emplea la fitoterapia están constituidas por compuestos de diferente naturaleza química, a estas mezclas se les llama fitocomplejos, los cuales, una vez evaluados en estudios farmacológicos y ensayos clínicos rigurosos, previos a su administración, constituyen un fitoterapéutico.
La Organización Mundial de la Salud ha planteado estrategias para incluir estas alternativas terapéuticas en la salud pública, centrándose en aspectos como la seguridad, eficacia, calidad, acceso y uso racional.
Desde finales de 2014, las costas del Caribe mexicano y de la Península de Yucatán ha recibido periódicamente afluencias masivas y atípicas de sargazo. Los impactos negativos de estas afluencias incluyen: la mortalidad de flora y fauna cercana a la costa, la erosión de las playas, la contaminación, la disminución del turismo y los altos costos de remoción. Sin embargo, el sargazo presenta varias propiedades que podrían ser de utilidad para las industrias alimentaria y farmacéutica, desarrollándose una potencial economía circular basada en estas macroalgas.
Desde el 2021 en las escuelas de Nutrición y Biotecnología se desarrollan proyectos enfocados en el sargazo, tales como la extracción de biopolímeros para generar vehículos de dosificación y películas biodegradables o estudios toxicológicos sobre sus residuos en descomposición en las playas.
Durante el presente semestre se dio inicio un proyecto que involucra un enfoque de química verde o libre de solventes tóxicos, combinada con procesos extractivos alternativos como el ultrasonido, con el fin de obtener del sargazo compuestos capaces de ejercer potenciales efectos terapéuticos. Principalmente se buscan compuestos fenólicos y flavonoides, los cuales se caracterizan por su amplia y diversa actividad biológica. En el corto plazo se iniciarán ensayos in vitro para determinar propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antimicrobianas, antihipertensivas y antidiabéticas.
En una siguiente etapa se identificarán los compuestos presentes en los extractos y se realizarán estudios en modelos animales experimentales, con el fin de obtener dosificaciones seguras y conocer posibles efectos secundarios. El desarrollo de fitoterapéuticos involucrará varias etapas y trabajo arduo por parte de investigadores y alumnos, sin embargo, es una propuesta de valor que permitirá dar un mejor manejo y aprovechamiento al sargazo que arriba a las costas, reduciendo así su impacto negativo.
Actualmente la Escuela de Nutrición colabora en dos proyectos interinstitucionales enfocados en el manejo del sargazo:
*Escrito por Dr. Jorge Carlos Ruiz Ruiz, Profesor-investigador, Escuelas de Nutrición y Biotecnología.